Kanban es una metodología ágil utilizada en la gestión de proyectos que se enfoca en la visualización del trabajo y la optimización del flujo de tareas. Su origen se remonta a Toyota en la década de 1940, donde se utilizó para mejorar la producción en sus fábricas. En el contexto del desarrollo de software, Kanban se adapta para ayudar equipos a gestionar su trabajo de manera más eficiente. La principal herramienta de Kanban es el "tablero Kanban", que es una representación visual de las tareas y su estado actual. Este tablero suele dividirse en columnas que representan diferentes etapas del proceso de trabajo, como "Por Hacer", "En Progreso" y "Hecho". Cada tarea se representa con una tarjeta que se puede mover de una columna a otra a medida que avanza en el proceso. Esta visualización permite que todos los miembros del equipo vean el estado del trabajo en tiempo real y fomenta la colaboración. Un aspecto clave de Kanban es el concepto de limitación de trabajo en progreso (WIP, por sus siglas en inglés). Esta práctica ayuda a prevenir el exceso de trabajo en una sola etapa del proceso, permitiendo que el equipo se enfoque en completar tareas antes de comenzar nuevas. Por ejemplo, si un equipo establece un límite de tres tareas en progreso, esto obligará a los miembros a finalizar una tarea antes de iniciar otra, lo que mejora el flujo y reduce el tiempo de entrega. Kanban promueve la mejora continua a través de revisiones regulares, donde el equipo puede analizar su rendimiento y buscar maneras de optimizar el proceso. Esto se suele hacer en reuniones llamadas “retrospectivas”, donde se discuten qué funcionó bien y qué podría mejorarse. Por ejemplo, en un equipo de desarrollo de software, un tablero Kanban podría lucir de la siguiente manera: - **Por Hacer**: Implementar login - **En Progreso**: Desarrollo de la interfaz de usuario - **Revisión**: Pruebas del sistema - **Hecho**: Funcionalidad de registro completada La colaboración y la comunicación son fundamentales en Kanban. Los miembros del equipo son responsables de mover las tarjetas en el tablero y de discutir los bloqueos o problemas que surjan. Esto fomenta un enfoque proactivo y colaborativo, donde todos trabajan juntos para lograr los objetivos del proyecto. En resumen, Kanban es una metodología ágil que visualiza las tareas, optimiza el flujo de trabajo y promueve la colaboración en equipos. Esta metodología se adapta fácilmente a diferentes tipos de proyectos y permite a los equipos ser más flexibles y eficientes en sus entregas.

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